Hola amigos, llego Semana Santa y con ella el dulce mas típico de esta época, un dulce pasado de abuelas a hijas y nietas desde tiempos inmemoriales, a mi me lo enseño una abuelita que vivía en mi edificio cuando yo era niña, y desde entonces las preparo igual que ella aunque jamas me salieron igual de ricas, es un dulce fácil, económico y delicioso, para acompañar con un buen café a la hora del desayuno o merienda, y existen miles de variedades a la hora de prepararlas, las mas conocidas quizás sean las de leche y las de vino, en mi caso prefiero las de leche para que sean aptas para todos, pero si las van a comer los mayores no dejéis de probarlas con vino pues están ummmm.
INGREDIENTES:
1 barra de pan del día anterior
1 litro de leche
azúcar
canela
3 huevos
PREPARACIÓN:
Ponemos a hervir la leche con canela en rama, cuando llega al punto de ebullición la retiramos del fuego y le añadimos 8 cucharadas de azúcar, y un chorrito de vino tinto al gusto si decidimos hacerlas con vino.
Dejamos que la leche se entibie para que la canela infusione y la aromatice muy bien.
Cortamos las rodajas de pan gruesas, de 2 cm mas o menos, y batimos los huevos para rebozarlas, vamos empapando bien el pan en la leche tibia y la pasamos por el huevo batido con mucho cuidado para que no se nos rompan.
*no os preocupéis si alguna se rompe, pues es lo mas normal y seguramente serán las mas ricas ya que se rompen porque son las que mas empapadas en leche están.
Las freiremos en tandas pequeñas en abundante aceite bien caliente hasta que se doren, cuando las sacamos del aceite las rebozamos en una mezcla de azúcar con canela y las colocamos en una bandeja para que se enfríen.
Listo ya tenemos las torrijas listas, ahora un café y a disfrutarlas.
Espero que os gusten y como estoy segura que muchos de vosotros las preparáis que me mandéis vuestras fotos y variedades para compartirlas con todos en el album de fotos. Lu
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